Una carta comercial de 1904 que es acompañada con hilos de seda de principios del s. XX perfectamente conservados muestran la calidad intemporal del género de la industrial 'Petra F. Martínez', y es testigo de la importancia que tuvieron en esta población andaluza las fábricas de seda.
 |
| (Imagen. Colección particular Santi de Santos) |
Cesáreo Fernández Martínez nacido en Villoslada de Cameros en 1842 se traslada a Sevilla con sus tíos Manuel y Marcelino Martínez, funda la fábrica de hilados de seda el día de San Mateo de 1870 que contará con 200 obreros de continuo.
Guía de Sevilla 1874:
"Césáreo F. Martínez y Cª Dados, 25 y Alonso el Sabio,1. Exportación para todos los puertos de España y América. Venta al por mayor y menor:
"Gran fábrica de torcidos de seda para coser y tejidos movida al vapor con cuantos adelantos se conocen hasta el día. Sedas en curdo y tintadas para ambos objetos. Toda clase de cintas y cordones de seda en negros y colores. Cintas para sombreros de todas clases, anchos y dibujos tanto en negro como en colores. Trenzas y galones de seda para sastre, de todos los anchos, de bonitos y variados dibujos. Terciopelos negros en cintas para adornos de trajes. Abundante surtido de algodón brillo, imitación al cabello, negro y colores, en madejas y trenzas hechas. Caprichoso y abundante surtido de peinados confeccionados de pelo vegetal, tanto en negro como en colores".
Comercializará entre otras las marcas ‘el Gato’ y ‘Castillo Heráldico’. En 1900 le sucede su hija Petra.
Comentarios
Publicar un comentario